Si bien no ha sido uno de los puntos más difundidos de los proyectos de ley que sustentan el proceso de descentralización, el Ejecutivo plantea crear ocho nuevas áreas metropolitanas (AM), que son unidades de administración territorial paralelas, que agruparán a dos o más comunas vecinas (ver infografía).
Con estas áreas metropolitanas el Ejecutivo quiere generar soluciones integrales, con un fondo de financiamiento especial, para enfrentar los problemas comunes: por ejemplo, la disposición de la basura, la contaminación ambiental y la congestión vehicular. En todas estas problemáticas, su origen e impacto sobrepasan los límites naturales de cada comuna, así como la solución no depende de la gestión de cada alcalde por separado. “A propósito de los rellenos sanitarios, es más fácil que varias comunas negocien juntas con una empresa y así obtener mejores tarifas, que si negocian por separado. Si se quisiera hacer de la basura un negocio rentable de reciclado, un área metropolitana podría hacerse cargo como contraparte para generar el volumen necesario que hace falta para que una empresa se interese en tratamientos menos contaminantes”, explica el subsecretario de Desarrollo Regional, Ricardo Cifuentes.
Según el proyecto, se creará una unidad especial al interior del gobierno regional que actuará como una secretaría ejecutiva de las nuevas áreas metropolitanas. Las decisiones tendrán que ser consensuadas en un concejo formado por los alcaldes involucrados, siendo el jefe de la comuna más numerosa el que coordinaría esta instancia junto con el futuro gobernador regional electo.
Alto Hospicio, comuna separada sólo por 10 kilómetros de Iquique, tuvo una explosión demográfica en los años 90, pasando de 2 mil habitantes a los actuales 106 mil, y junto con Iquique suman una sola urbe de 302 mil vecinos que duermen y trabajan en el llamado “Gran Iquique”, compartiendo también los problemas de las grandes ciudades. “Sin embargo cada comuna es distinta, tiene que ver incluso en cómo se lleva un alcalde con el otro, entran ahí los celos políticos y profesionales. Hasta ahora, no hemos podido llegar a un acuerdo con el alcalde de Iquique para generar un relleno sanitario conjunto, entonces, ¿cómo aunar criterios, cuando un alcalde quiere colaborar en un tema y el otro no?”.
La coordinación entre alcaldes podría ser uno de los principales escollos que tendrán las AM. “Habría que analizar si nos conviene o no. Con el alcalde de Rancagua ya hemos visto algunas cosas en materia de conectividad (…) yo le propuse un tranvía Machalí-Rancagua, pero también depende de la voluntad del alcalde vecino. Pero si se pueden hacer cosas en conjunto, mucho mejor, porque eso facilita el camino a la comuna más chica”, dijo el edil de Machalí, José Miguel Urrutia.
Tramitación pendiente
El proyecto del Ejecutivo sobre fortalecimiento de la regionalización, que recoge la creación de las AM como parte de las competencias que serán traspasadas desde el gobierno central a los gobiernos regionales, ya fue despachado por la comisión de Gobierno Interior a la Comisión de Hacienda de la Cámara, debido a que contempla gastos fiscales. De aprobarse, pasará a sala para votación y despacho al Senado, en su tercer y último trámite constitucional.
Mientras, la Subdere hará un pilotaje este 2016 para ajustar la marcha de las AM en Los Lagos, Biobío y Coquimbo, y así ajustar el proyecto y las aprensiones que pudiera haber entre los alcaldes. “Es justo en los límites comunales donde todos los problemas se acrecientan porque ningún alcalde quiere asumir el costo solo. Por eso, creo muy difícil que un alcalde se oponga a participar de estas áreas metropolitanas. Son tantos los problemas comunes entre ciudades vecinas que son los mismos vecinos quienes exigirán soluciones”, señaló José Abalos, secretario técnico de la ex Comisión Asesora Presidencial para la Descentralización.
Dicha comisión, que recorrió el país recogiendo el modelo de descentralización que las regiones querían, incluyó las AM en el documento final entregado a la Presidenta. “Lo que la Comisión propuso es crear una institucionalidad práctica y sencilla para la administración de las AM, con una adecuada articulación entre las competencias de los Gobiernos Regionales y los municipios, sin duplicar funciones ni crear un cuarto nivel de gobierno, como lo sería la figura de un Alcalde Mayor”, explicó Heirinch von Baer, presidente de la Fundación Chile Descentralizado y ex vicepresidente de la Comisión Presidencial para la Descentralización.
Fuente: Diario La Tercera
